'En picado sobre la ciudad', Tullio Crali
“Queremos cantar el amor al peligro, el hábito de la energía y de la temeridad”, con estas palabras fundaba hace 100 años Filippo Tommaso Marinetti el movimiento vanguardista conocido como Futurismo. Una Centuria después, la Fundación Proa recoge en una muestra histórica con más de 240 piezas de la más amplia diversidad poética dedicada al movimiento que intentó traspasar las fronteras de su propia idiosincrasia y romper con los signos establecidos de la historia del arte.
A la aventura poética de Marinetti se sumaron artistas de todas las disciplinas, destacándose la literatura, la arquitectura, la moda y el teatro. El futurismo buscaba romper con el arte establecido centrándose principalmente la “sensación de movimiento” y velocidad de las nuevas metrópolis italianas de principios de siglo XX, y en el surgimiento de la máquina como elemento de trasformación de la sociedad moderna.
En su intención de romper con el pasado, el futurismo postula al museo como cementerio, espacio vacío donde solo cabe la tradición. Hoy, un repaso por el movimiento de vanguardia con obras que en su gran mayoría pertenecen a la colección del Mart, la Fundación Proa recrea el Universo Futurista en una lectura bien ordenada por grupos de obras que permiten comprender las bases del movimiento. Una sección dedicada al pintor y músico Luigi Russolo, otra a los personajes teatrales de Fortunato Depero, una especialmente a la fotografía, y por último una sección destacada a la literatura y la poesía.
Para acercarnos más al movimiento italiano que, aunque de corta duración, influenció a las generaciones venideras de artistas, una sección dedicada a Emilio Petorutti, argentino inscripto en la vanguardia futurista, permite comprender desde el punto de vista de un platense la riqueza de “la velocidad” de un movimiento clave de principios del siglo pasado.
A la aventura poética de Marinetti se sumaron artistas de todas las disciplinas, destacándose la literatura, la arquitectura, la moda y el teatro. El futurismo buscaba romper con el arte establecido centrándose principalmente la “sensación de movimiento” y velocidad de las nuevas metrópolis italianas de principios de siglo XX, y en el surgimiento de la máquina como elemento de trasformación de la sociedad moderna.
En su intención de romper con el pasado, el futurismo postula al museo como cementerio, espacio vacío donde solo cabe la tradición. Hoy, un repaso por el movimiento de vanguardia con obras que en su gran mayoría pertenecen a la colección del Mart, la Fundación Proa recrea el Universo Futurista en una lectura bien ordenada por grupos de obras que permiten comprender las bases del movimiento. Una sección dedicada al pintor y músico Luigi Russolo, otra a los personajes teatrales de Fortunato Depero, una especialmente a la fotografía, y por último una sección destacada a la literatura y la poesía.
Para acercarnos más al movimiento italiano que, aunque de corta duración, influenció a las generaciones venideras de artistas, una sección dedicada a Emilio Petorutti, argentino inscripto en la vanguardia futurista, permite comprender desde el punto de vista de un platense la riqueza de “la velocidad” de un movimiento clave de principios del siglo pasado.
Desde el 1° de abril en
Fundación PROA
Av. Pedro de Mondoza 1929
Por Matías Schmidt.
1 comentarios:
Prometedor comienzo. No olviden identificar las entradas por etiquetas con el nombre o iniciales del autor. Nos vemos.
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